La Lacha o Latxa es una raza ovina española propia del País Vasco y Navarra.
Forma parte de las razas de ovejas del País Vasco y Navarra de pelo largo que no se han cruzado con sangre de ganado merino debido a la prohibición de las importaciones de animales exógenos. Se ha criado durante mucho tiempo en las provincias de Vizcaya, Álava, Guipúzcoa y Navarra.
Hay dos subrazas: la Lacha de cara negra (LCN, Ardi latx muturbeltza en euskera) con la cabeza negra, predominante entre Guipúzcoa y Navarra, la Lacha de cara rubia (LCR, Ardi latx muturgorria en euskera) de cabeza rojiza, predominante en Álava oriental y la Lacha carranzana, dominante en la esquina noroccidental de Álava y en la raya de Vizcaya con Cantabria.
Tiene un vellón de pelo muy largo, que casi toca el suelo, de lana áspera (latxa significa «áspero» en euskera) y grasa, adaptada a la climatología local perteneciente a la España húmeda. El pelo corto de la cabeza es de color rojizo o negro. El macho tiene unos cuernos retorcidos alrededor de las orejas. La LCR tiene una alzada a la cruz de 65 cm, la LCN de 75 cm.
La oveja lacha se cría principalmente por su leche, destinada a la elaboración del queso DOP Idiazábal. La oveja produce alrededor de un litro de leche diario durante un período de 140 días para la LCN y 155 días para la LCR. Los corderos son destetados muy pronto con el fin de reservar de leche para la fabricación de queso. Se venden a los criadores y son alimentados con leche en polvo y, terminado el verano, con los pastos de montaña, produciendo animales de sabrosa carne.
Los corderos nacen con gran peso, debido a que la gestación es prolongada (154 días). Esto conlleva a que el 30-40% de los partos sean distócicos.
Texto extraido de Wikipedia.